"Ha sido motivo de gran alegría para mi ver al comandante Fidel sano y salvo", dijo Ahmadineyad a periodistas en el aeropuerto de La Habana, donde fue despedido por el presidente Raúl Castro antes de concluir su visita oficial a Cuba y viajar con destino a Ecuador.
El presidente iraní calificó de "buenísimas" tanto la reunión con Fidel Castro como la que mantuvo posteriormente con el presidente Raúl, al que se refirió como "mi querido hermano".
"En realidad (Cuba e Irán) estamos en un mismo frente luchando con el fin de reivindicar los derechos de los pueblos", declaró Ahmadineyad.
Agregó que su Gobierno y el de Cuba tienen "posturas comunes" en muchos asuntos regionales e internacionales y que ambos países seguirán colaborando en las áreas económicas, de inversiones, comercio y en otros asuntos políticos.
Ahmadineyad y el general Raúl Castro también analizaron la actualidad de Oriente Medio "de manera muy positiva y detallada" y con posiciones e interpretaciones "muy cercanas", según el dirigente iraní.
"Hemos sido, somos y seremos, buenos amigos", concluyó Ahmadineyad, quien se despidió de los periodistas con un "¡Viva Cuba!" en español.
Por su parte, el presidente Raúl Castro comentó a los periodistas que la de Ahmadineyad ha sido "una buena visita".
"Ya él lo dijo todo. Discutimos bastante, analizamos bastante, terminamos muy tarde. Ha descansado poco y ahora va para Ecuador", dijo el general Castro.
Cuba ha sido la tercera escala de la gira latinoamericana de Ahmadineyad, que comenzó a principios de semana en Venezuela, siguió en Nicaragua y concluirá en Ecuador.
Este periplo ha estado marcado por la intensificación de las acusaciones de gran parte de la comunidad internacional, con Estados Unidos e Israel a la cabeza, contra el programa nuclear iraní ante el temor a que desarrolle armas atómicas, lo que Teherán niega.
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