Sorpresa. El Presidente derrocado de Honduras reingresó en secreto a Tegucigalpa y se atrincheró en la embajada de Brasil, lo que causó un toque de queda y el cierre de aeropuertos.Otros países piden calma.La crisis en Honduras tiene un nuevo giro con el sorpresivo retorno de Manuel Zelaya al país. El Gobierno de facto de Roberto Micheletti se sintió burlado y tomó medidas coercitivas inmediatas (un toque de queda de 15 horas y el cierre de todos los aeropuertos) y emplazó a Brasil para que “entregue a la justicia al mandatario destituido”.
La embajada brasileña es la trinchera que eligió Zelaya a su regreso. Desde allí declaró que llegaba para iniciar un diálogo y que estaba dispuesto a no dormir, incluso, con tal de lograrlo. “Pacíficamente vamos a buscar el diálogo por la democracia”, anunció Zelaya.Pero la tensión ya está instalada en Honduras y la comunidad internacional ha enviado mensajes para evitar que se genere violencia.Apenas se rumoreó que Zelaya estaba en Honduras, Micheletti lo negó y atribuyó la noticia a un ‘terrorismo mediático’. “No es cierto, él está en una suite en un hotel de Nicaragua", dijo Micheletti más temprano.
Las primeras versiones del retorno de Zelaya fueron difundidas por la cadena multiestatal Telesur y poco después el mandatario venezolano, Hugo Chávez, confirmó la presencia del presidente depuesto en Tegucigalpa, tras hablar con él por teléfono en vivo.La reacción del Gobierno de facto fue la de decretar un toque queda de 15 horas, desde las 16:00 de ayer hasta las 7:00 de hoy y cerrar todos los aeropuertos. Posteriormente, Micheletti pidió a Brasil que entregue a Zelaya. Desde EEUU, donde se encuentra el canciller brasileño, Celso Amorim, respondió que su país sólo se enteró de la llegada de Zelaya cuando llegó a su sede diplomática a pedir asilo, y que por lo tanto no estaba involucrado en la maniobra política.
En general, la reacción de la comunidad internacional ha sido de apoyo a Zelaya, pero con pedidos de calma ante una eventual espiral de violencia. El secretario de la OEA, José Miguel Insulza se ofreció para viajar hoy y colaborar en la mediación de la crisis, al igual que el presidente de Costa Rica, Óscar Arias, que ya había intentado un plan para resolver el conflicto, que no tuvo éxito.
Hoy es un día clave para el desenlace de la situación. Depende de la capacidad de diálogo de ambas partes para evitar enfrentamientos. Ayer, cientos de seguidores fueron a la embajada brasileña a dar su apoyo a Zelaya. El presidente destituido se reunió con su familia en la terraza del recinto.
La embajada brasileña es la trinchera que eligió Zelaya a su regreso. Desde allí declaró que llegaba para iniciar un diálogo y que estaba dispuesto a no dormir, incluso, con tal de lograrlo. “Pacíficamente vamos a buscar el diálogo por la democracia”, anunció Zelaya.Pero la tensión ya está instalada en Honduras y la comunidad internacional ha enviado mensajes para evitar que se genere violencia.Apenas se rumoreó que Zelaya estaba en Honduras, Micheletti lo negó y atribuyó la noticia a un ‘terrorismo mediático’. “No es cierto, él está en una suite en un hotel de Nicaragua", dijo Micheletti más temprano.
Las primeras versiones del retorno de Zelaya fueron difundidas por la cadena multiestatal Telesur y poco después el mandatario venezolano, Hugo Chávez, confirmó la presencia del presidente depuesto en Tegucigalpa, tras hablar con él por teléfono en vivo.La reacción del Gobierno de facto fue la de decretar un toque queda de 15 horas, desde las 16:00 de ayer hasta las 7:00 de hoy y cerrar todos los aeropuertos. Posteriormente, Micheletti pidió a Brasil que entregue a Zelaya. Desde EEUU, donde se encuentra el canciller brasileño, Celso Amorim, respondió que su país sólo se enteró de la llegada de Zelaya cuando llegó a su sede diplomática a pedir asilo, y que por lo tanto no estaba involucrado en la maniobra política.
En general, la reacción de la comunidad internacional ha sido de apoyo a Zelaya, pero con pedidos de calma ante una eventual espiral de violencia. El secretario de la OEA, José Miguel Insulza se ofreció para viajar hoy y colaborar en la mediación de la crisis, al igual que el presidente de Costa Rica, Óscar Arias, que ya había intentado un plan para resolver el conflicto, que no tuvo éxito.
Hoy es un día clave para el desenlace de la situación. Depende de la capacidad de diálogo de ambas partes para evitar enfrentamientos. Ayer, cientos de seguidores fueron a la embajada brasileña a dar su apoyo a Zelaya. El presidente destituido se reunió con su familia en la terraza del recinto.
Tres meses de incertidumbre
- 28 de junio. Zelaya, detenido por comandos del Ejército en su casa y expulsado a Costa Rica, es sustituido por Roberto Micheletti, que asume la Presidencia de Honduras.- 29 de junio. La ONU condena de forma unánime el golpe de Estado.- 4 de julio. La Asamblea General de la OEA suspende por unanimidad la participación de Honduras en el organismo.- 5 de julio. Zelaya parte de Washington hacia Honduras en un avión venezolano, pero no puede aterrizar en Tegucigalpa debido a la presencia de vehículos en la pista del aeropuerto.- 18 de julio. El presidente costarricense, Óscar Arias presenta un plan de siete puntos, entre ellos la restitución de Zelaya como presidente hasta enero, lo cual es rechazado por el Gobierno de facto.- 24 de julio. El depuesto jefe de Estado llega a Las Manos, punto fronterizo entre Nicaragua y Honduras, donde cruza la línea divisoria y permanece dos horas en una zona neutral, para luego regresar a Nicaragua ante la presencia de contingentes militares en el lado hondureño con la orden de detenerle.- 21 de septiembre. Zelaya anuncia que se encuentra en Tegucigalpa en la embajada de Brasil.
Reacciones
OEAExige respeto al Presidente El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) exigió al Gobierno de facto hondureño que respete la vida del presidente destituido Manuel Zelaya, que regresó al país, y que se evite la violencia. El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, se declaró dispuesto a viajar hoy a Tegucigalpa para contribuir a solucionar la crisis, tras 86 días de golpe de Estado. /(AFP)
BrasilAboga por solución rápidaBrasil espera que el regreso a Tegucigalpa del presidente Manuel Zelaya, refugiado en la embajada brasileña, facilitará una solución rápida y su regreso al poder, dijo el canciller Celso Amorim. “Su presencia en Honduras ciertamente es un hecho nuevo, que junto a varias medidas de la comunidad internacional creo que facilitará un diálogo para que se encuentre rápidamente una solución”, agregó. /(AFP)
Clinton y AriasInstan al diálogo bilateral La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, dijo que Manuel Zelaya y el Gobierno de facto de Honduras deben encontrar una forma para alcanzar el diálogo y evitar la violencia. A su vez, el presidente de Costa Rica, Óscar Arias, que habló tras una reunión con Clinton en la ONU, también dijo que está dispuesto a viajar a Honduras para intentar una mediación. /(Reuters)
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