Zonas afectadas en la ciudad de La Paz. |
La Paz, 28 Feb (Atipiri / Erbol).- Los vecinos de las zonas de la ciudad de La Paz, que desaparecieron tras un mega deslizamiento, denunciaron hoy a través de Erbol una serie de hechos de robo en medio de la tragedia y demandaron al presidente Evo Morales intervenir de inmediato con los organismos de seguridad del Estado en toda la región afectada para evitar el saqueo de los pocos bienes que lograron rescatar de sus casas antes de éstas se desplomaran al barranco durante el pasado fin de semana.
Los antisociales, aprovechando el pánico y la desgracia de los vecinos de las zonas de Valle de las Flores, Pampahasi Central, Kupini II, Kallapa y Metropolitana, robaron todos los bienes materiales que han podido y encontraron a su paso.
Don Hernán, uno de los damnificados que quedó en la calle junto a sus pequeños hijos, dijo que perdió toda sus cosas, porque cuando llegó a su casa el pasado sábado, sólo cinco minutos antes de que se caiga, apenas logró rescatar a sus seres queridos y que los pocos bienes materiales que estaba sacando de su inmueble se lo robaron. Los antisociales, aprovechando el pánico y la desgracia de los vecinos de las zonas de Valle de las Flores, Pampahasi Central, Kupini II, Kallapa y Metropolitana, robaron todos los bienes materiales que han podido y encontraron a su paso.
“Llegue en la tarde, mi casa ya estaba unos tres metros más abajo, entonces a gritos entré desesperado a buscar a mis hijos, ellos estaban como en un círculo asustados, de inmediato los saqué, luego volví por algunas de mis cosas, porque en principio el piso se fue abriendo y hundiendo lento, pero cuando en una cama logré sacar útiles de mis hijos y algunas otras cosas, como documentos, lo puse afuera al borde del barranco y me lo robaron todo mientras yo volví por más cosas”, relató con lágrimas en los ojos, al indicar que luego sólo en unos segundos su inmueble se fue unos 250 metros para abajo.
Otra vecina de Pampahasi agregó, que si bien su casa aún no se cayó al precipicio, esta mañana recién volvió a casar sus cosas, porque cuando en medio de la oscuridad de la noche del sábado solamente logró huir del lugar asustada junto a su familia al ver que las avenidas, calles y casas se estaban abriendo como rompecabezas, para finalmente deslizarse al precipicio.
“Pero entré a mi casa que está también por caerse y encontré que me habían saqueado, realmente es una lastima, no encontré en la cocina ni víveres, en vez de que nos vengan a apoyar y colaborar, nos saquean, esto es increíble, se llevaron hasta la cortinas los ladrones, no puede ser que no sientan nuestra tragedia, la desgracia que estamos atravesando, cómo nos van a robar”, afirmó la señora en medio de un llanto desesperado.
Otros afectados del mega deslizamiento, como don Tomas y Arturo, llamaron al presidente Morales a intervenir personalmente en todas las zonas que están afectadas y ordenar a todas los efectivos policiales o hasta militares que sean necesarios para dar seguridad a los damnificados.
Estamos abandonados a nuestra suerte por las autoridades del municipio y del gobierno. “Hay al menos 11 casas de este sector de Pampahasi Central que están enterrados a más de 250 metros de profundidad con todas y sus cosas”, dijo Arturo.
“Solo pedimos en este momento de tanta desgracia que el gobierno y la Alcaldía se unan para ayudarnos, los necesitamos, por favor dejen de lado sus diferencias políticas, queremos además a la brevedad posible seguridad”, acotó.
Hay mucha preocupación entre los vecinos al ver que sigue latente la posibilidad de que más casas sigan cayendo al precipicio por la inestabilidad de la región y por la falta de alimentos.
“Las familias no tenemos dónde dormir ni qué comer, hasta ahora (10.25) no comimos nada, ni tomamos desayuno, necesitamos ayuda”, aseguró otro vecino de la zona.
Otro de los colindantes dijo que su casa que está al borde del precipicio y que quiere sacar del inmueble al menos sus documentos de propiedad. Otra persona afirmó que la esperanza que tiene es rescatar su vehículo que ya está con una de las llantas raseras al aire y que los efectivos de Bomberos no les dejan pasar.
La desolación y desconcierto en estas zonas de la ciudad de La Paz sigue, mientras decenas de rescatistas ayudan a las familias de la zona a sacar sus bienes de a poco. El servicio de energía está interrumpido en varias áreas y también el corte de agua potable persiste.
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