“Libertad, Unión e Independencia son los nombres sugeridos por Álvaro Villarroel Mejía para los Puentes Trillizos, propuesta que ganó el concurso emitido por la Municipalidad paceña dotado de Bs5.000 En segundo lugar, con un premio de Bs3.000, se ubicó Enrique Ibáñez Fuentes que planteó: Arturo Borda, Jaime Sáenz y René Bascopé”, indica la nota de prensa del GMLP.
El jurado, conformado por Mónica Vera (representante del Club de La Paz), Ramiro Loza (Amigos de la Ciudad), Raúl Calderón (Carrera de Historia de la UMSA), Augusto Yépez (Facultad de Arquitectura de la UMSA) y Boris Quisbert (Federación de Trabajadores de la Prensa), eligió las dos propuestas entre 80 que fueron planteadas por 66 participantes.
Villarroel, egresado de la carrera de Derecho que trabaja en la Editorial “Sideral Cultural”” propuso que Libertad, Unión e Independencia sean los nombres para los puentes que se levantan sobre los ríos Kantutani, Choqueyapu y Orkojahuira.
El primero hace referencia al sueño de libertad de indígenas, mestizos y criollos, respecto al dominio español, a la sublevación de Katari, de los protomártires liderados por Murillo y muchos hitos históricos que concluyeron con la Fundación de la República.
Unión es una palabra genérica de varias connotaciones: ser el puente del medio que une tradicionales barrios, la unión entre paceños y de éstos con los bolivianos que, incluso, se halla como una palabra importante de la moneda nacional. Finalmente está la Independencia de nuestro país a partir de 1825, dijo Villarroel que tiene el hábito de leer cuanto libro llega a sus manos.
“Los nombres sugeridos marcan la lucha de los pueblos para combatir contra la tiranía de los españoles logrando la Unión de muchas naciones que lucharon por el sueño de la Libertad para lograr la Independencia. Es el símbolo de un sueño hecho realidad”, dijo el ganador.
Enrique Ibáñez, un administrador de empresas que trabaja en una Agencia de Viajes y logró el segundo lugar, se inclinó por personajes paceños: Arturo Borda evocando al escritor y pintor cuya inspiración fueron las silenciosas figuras de la Hoyada. Jaime Sáenz, el poeta y novelista que renovó el lenguaje poético y narrativo en la segunda mitad del siglo anterior y René Bascopé, otro connotado escritor.
“Estos personajes han hecho de la ciudad la mayor fuente de inspiración para su trabajo artístico. En sus creaciones, La Paz es protagonista vital y absoluta. Los tres pertenecen a distintas generaciones y son íconos de la literatura boliviana”, indicó Ibáñez, que debido a la abundante literatura que leyó, quiso rendir un homenaje a los escritores de su preferencia,
A sugerencia de la Oficialía Mayor de Culturas, las nominaciones podían resaltar hechos de la historia nacional, de personalidades paceñas de cualquier área o de preservación de la identidad, costumbres, tradiciones, espacios naturales, memoria histórica u oral de Bolivia y/o La Paz.
Los premios serán entregados en la Gala Cultural a realizarse en noviembre.(Erbol)
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