3 de Nov. (Atipiri / tomado de infobae.com).- Los conservadores liderados por John Boehner (foto) tendrán 240 escaños, 61 más que los obtenidos en 2006. Los demócratas mantuvieron la mayoría en el Senado.
Los resultados concuerdan con la mayoría de los sondeos previos a las elecciones de medio término de este martes, en las que el opositor Partido Republicano logra la mayoría en la Cámara de Representantes, hasta ahora dominada por el oficialismo.
Por el momento tiene asegurados 240 legisladores, contra 181 del Partido Demócrata, sobre un total de 435. Quedan aún por definir 13 asientos. Así, el presidente Barack Obama deberá convivir durante lo próximos dos años de su gestión con una fuerte oposición parlamentaria.
Además, la presidencia del órgano pasará de la demócrata Nancy Pelosi al conservador John Boehner, quien, tras la victoria, condicionó el apoyo republicano al gobierno a que "Obama respete la voluntad popular y cambie el rumbo". El mandatario contestó: "espero que encontremos «puntos en común»" (ver nota relacionada).
A la hora de analizar las preferencias de los ciudadanos en la Cárama de Representantes, fue clave en la elección el voto de los grupos denominados "independientes", que, según un sondeo de la cadena CNN, correspondería al 28% de los votantes. Entre ellos, el 56% se habría inclinado por un candidato republicano. La señal de noticias agregó que los jubilados también habrían castigado el presidente con su voto.
La pelea en el Senado
Con 51 bancas aseguradas, los demócratas mantendrán el control de la cámara, aunque tendrán una leve mayoría. Cuando sólo restan definir tres lugares, los republicanos obtienen 46 escaños, sobre un total de 100.
Rand Paul se había convertido este martes en el primer senador del movimiento ultraconservador Tea Party al triunfar en el estado de Kentucky. Marco Rubio también alcanzó una victoria en Florida, según los primeros datos.
No obstante, los demócratas ganaron carreras clave en Virginia Occidental y California, donde la senadora Barbara Boxer fue reelecta, lo que les permite mantener una leve mayoría en el Senado.
A su vez, los republicanos arrebataron tres escaños a los demócratas en Indiana, Dakota del Norte y Arkansas, pero no consiguieron imponerse las seis cruciales carreras senatoriales, incluyendo estados de tendencia demócrata como California y Washington, para obtener los diez escaños del oficialismo que le hubieran permitido hacerse con la mayoría de la Cámara.
Se calcula que en estas elecciones –en las que se renueva la totalidad de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, además de 37 puestos de gobernador– han salido a votar unas 90 millones de personas, un récord para las elecciones legislativas en la historia de los Estados Unidos.
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