El Alto, 7 Abr. (Atipiri)- Eduardo Garay, jefe de la Unidad Técnica de la Empresa Municipal de Aseo El Alto (EMALT), informó a Radio Atipiri, que ésta urbe requiere un nuevo relleno sanitario con una extensión de más de 40 hectáreas proyectada para una duración de más de 15 años. Garay manifestó que para éste propósito el suelo debe ser arcilloso, lo que permite disponer de material de cobertura; no debe existir agua y debe estar por lo menos a un kilómetro de la mancha urbana, según la norma boliviana NBC 158 que fija los parámetros técnicos para rellenos sanitarios.
Con relación a la posibilidad del traslado del relleno a otro, Garay sostuvo que “trasladarse a un nuevo relleno sanitario no es como cambiarse de casa. Se requiriere comprar el terreno, equipar la infraestructura, los caminos, las oficinas, construir las celdas, requería un año y medio de obras”.
Al respecto, el Director de Servicios Públicos del municipio, Mario Siñani, detalló que se estudia la posibilidad de adquirir terrenos en Alto Milluni, Amachuma, y hasta se piensa en un relleno metropolitano. Estos aspectos deben ser analizados con detenimiento además de las posibles negociaciones a emprender con los ciudadanos que viven cerca del lugar, dijo.
CAPACIDAD
El Alto produce aproximadamente 450 toneladas diarias de basura que son recogidas por la empresa de Tratamiento de Residuos de Bolivia (Trebol), posteriormente, ésta basura es depositada en el relleno sanitario de Villa Ingenio. Con el actual ritmo de generación de basura, Garay señaló que la capacidad del actual relleno sanitario podrá aguantar hasta el mes de mayo y/o junio. En este lapso de tiempo, se puede depositar unas 20 mil toneladas más de basura, aseguró.
Garay, estima que la capacidad volumétrica de los desechos depositados desde sus inicios fácilmente sobrepasa las dos millones de toneladas de basura.
La ingeniera Soledad Flores de la empresa Colina, detalla que, para el cierre se ejecutan unos 17 sub proyectos, referidos a la cobertura, el camino de ingreso, entre otros detalles más.
SIN CONTAMINACIÓN
Flores asegura que un estudio hidrogeológico, realizado por un estudiante de maestría, con la Cooperación Catalana, descartó la contaminación subterránea. Gracias al estricto control de la empresa Colina; los residuos que generan biogás y lixiviados están controlados, añadió.
Garay asegura que no existe contaminación, subterránea ni externa, gracias a la impermeabilización en los residuos sólidos comunes y el tratamiento especial de los desechos patógenos.
La única solución momentánea que divisa el ingeniero Gary es la adquisición de terrenos adyacentes al relleno sanitario. “Por lo menos unas cinco hectáreas de terreno nos permitirían una vida adicional de dos a tres años. Tiempo en que se tiene que hacer un estudio para trasladarse a un nuevo relleno sanitario”, finalizó.
Por su parte, la ingeniera Soledad Flores, Responsable de Planificación de la Empresa Colina encargada del tratamiento de los residuos del actual relleno sanitario de Villa Ingenio, sostiene que es muy difícil fijar el precio de un nuevo relleno sanitario por las características especiales del terreno.
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