lunes, 3 de octubre de 2011

EN EL ALTO RADIOS ‘PIRATAS’ LLENAN EL ESPECTRO RADIOFÓNICO DESDE HACE 9 AÑOS


Las instalaciones de radio Maya en El Alto (ATIPIRI).
El Alto, 3 Oct. (ATIPIRI).- Un trabajo de investigación realizado por el Periodista Julio Garay Aguirre de la ciudad de El Alto muestra que desde hace 9 años vienen funcionando más de 73 radios ‘piratas’ que acaparan todo el especto radiofónico alteño, mismas que operan de manera ilegal e interfieren las estaciones de radio y canales de TV legalmente establecidos. Los vecinos de El Alto, se quejan constantemente de estas interferencias. Medios legales afectados anuncian proceso penal contra estas estaciones radiales “clandestinas”. La entidad reguladora señala que efectúa controles periódicos.

Garay en una entrevista exclusiva con Radio Atipiri denunció que desde hace 9 años continúan proliferando más de 73 radios que funcionan en forma clandestina. Estas radios ilegales utilizan las frecuencias intermedias entre las radioemisoras legales para funcionar y abarcan de 2 a 3 kilómetros a la redonda. Cuanta más potencia tengan se aumenta la interferencia en la recepción.     
El Periodista se motivó a realizar ésta investigación luego de verse afectado al igual que la población en la recepción radios y canales de televisión.  

“Exijo que las autoridades tomen cartas en el asunto y hacer operativos más constantes como decían los Directores de medios legales que sea diario y semanales, porque ellos cuentan con equipos especiales para hacer la detección de los medios ilegales”, declaró Garay.

Las radios ‘piratas’ como titula la investigación principalmente se encuentran ubicadas en las zonas 16 de Julio, Ballivián, Alto Lima, Villa ingenio, Villa Esperanza, Río Seco, Villa Adela y Primero de Mayo, son las de mayor proliferación. Otras como en la zona central de la Ceja de El Alto, Villa Tunari, Los Andes, Tahuantinsuyo, Villa Ingavi, San Luís, Nuevos Horizontes, Santiago II, también existe una radio “pirata”, instalada de manera clandestina. Aunque en menor medida también comenzaron a emitir desde diversos puntos de la ciudad de La Paz.

Según Garay en el trabajo investigativo se constató que más de medio centenar de radioemisoras clandestinas continúan operando en diferentes zonas de la ciudad de El Alto, desde hace más de 9 años. A pesar del control que efectúa la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Telecomunicaciones y Transportes (ATT). En los últimos años han proliferado en mayor número. “Según Cliford Paravicini Director ejecutivo de la ATT; los operativos que efectúa el ente regulador son continuos y periódicos, pero que se hace insuficiente con el poco personal y equipos que cuenta esta dirección ejecutiva. Hasta la fecha la ATT detectó más de un centenar de radioemisoras ilegales en Amplitud Modulada y Frecuencia Modulada en toda Bolivia, además de algunos canales de televisión que funcionan sin la autorización correspondiente”, indica parte del documento de investigación.  

“Lo cierto es que estas radios a vista y paciencia de la ATT están funcionando. (Las radios ilegales) se pierden dos, tres semanas o un mes y vuelven a emitir la señal con otro nombre en las mismas frecuencias intermedias”, afirmó Garay.

Actualmente vecinos; de la Zona 16 de Julio, Ballivián, Alto Lima y Villa Ingenio, molestos denuncian interferencias en sus aparatos receptores de radio. Incluso, en algunos canales de televisión como el canal 2, el 4, el 5, el 11, y el 13 entre los afectados, que llegan con muchas dificultades por estas zonas de la ciudad de El Alto. Otros vecinos de estas zonas, la interferencia alcanza también a los celulares móviles.

Otras zonas afectadas con similar situación son Huayna Potosí, Villa esperanza, Río Seco y zonas aledañas al lugar. Tal cual lo denuncia Roberto Apaza de manera textual: “ya no podemos seguir sufriendo esta forma de interferencias que hace mucho daño a nuestros aparatos receptores, no podemos escuchar nuestras radios preferidas, no podemos ver los distintos programas de la tele cuando sólo sale unas rayas y no aparece ningún canal”, enfatiza el molesto vecino a tiempo de llamar a las autoridades del ramo que deben tomar cartas en el asunto de manera inmediata.

DE LOS OPERADORES ILEGALES

Se verificó que al margen de no contar con los requisitos técnicos legales que exige la Autoridad de Fiscalización y Control  de Telecomunicaciones (ATT), para la instalación de una estación de radio, los operadores de estos medios clandestinos sólo requieren de un transmisor de radiofrecuencia con una potencia establecida entre los 50 hasta 500 vatios.

“Consultado sobre el tema al ingeniero Ismael montes, técnico especialista en el área de telecomunicaciones, registrado en la ATT con más de 40 años de experiencia, dijo que el ente regulador, exige una serie de parámetros técnicos para la instalación y el ajuste de un equipo transmisor, en primer lugar uno debe estar registrado y tener la autorización que exige la ley de telecomunicaciones, en base a equipos especiales, ‘se necesita instrumental específico para ajustar un radiotransmisor; un analizador de espectro, un osciloscopio de banda ancha, un medidor de potencia y una carga fantasma de ajuste en AM y FM, siendo que con estos instrumentos se pueda hacer los ajustes necesarios para que no tenga armónicas, es decir ruidos ni interferencias’”, indica el documento de Investigación.  

A juicio de Garay el funcionamiento ilegal de radios ‘piratas’ causa peligros ambientales y daños al ser humano cuando estos equipos transmisores no están debidamente ajustados. Dijo que la ‘radiofrecuencia’ afecta al sistema nervioso, cuando se encuentran cerca y con mayor potencia.

“(Ismael Montes) dijo que cuando estos equipos no están ajustados emiten radiación y eso afecta al sistema nervioso, a la larga el cáncer en el cerebro cuando están cerca y no están debidamente ajustados, porque la ATT exige una serie de requisitos técnicos legales a los medios”, afirmó el Comunicador.

AMBIENTES

En una visita que se realizó Garay a estos medios de comunicación clandestinos se evidenció que funcionan en ambientes pequeños de manera improvisada. En uno o dos cuartos de tres por tres metros cuadrados; se encuentra el radiotransmisor, un teléfono, una mezcladora de audio, un lector de discos compactos, una grabadora, un pequeño receptor, uno o dos micrófonos, una mesa y una silla que ocupa el locutor.
Muchas radios ilegales optaron por camuflar sus antenas, como si este fuera una antena receptora de televisión y en algunas son torres construidas.   

IMPROVISACIÓN

En un monitoreo que también se efectúo sobre algunas radios ilegales en El Alto, se evidenció, que los conductores de los distintos programas, generalmente son jovenzuelos o fanáticos religiosos que no tienen ninguna formación profesional, menos básica sobre locución y comunicación llegando incluso, a extremos de hablar palabras soeces y disparates que son lanzados irresponsablemente al éter.

LUCRO

Según Garay estos medios de comunicación clandestinos mencionó que dichas emisoras “piratas” cobran desde 50 hasta 700 bolivianos mensuales por pases diarios, sin efectuar la facturación correspondiente.
Los dueños y propietarios de estos medios ilegales; además de lucrar de esta forma se apropian de las frecuencias intermedias, para posteriormente negociarlas o ponerlas a la venta en un determinado monto de dinero que sobrepasa los mil dólares americanos.

ORGANIZACIONES ALTEÑAS

En los últimos años algunas organizaciones sociales alteñas comenzaron a instalar sus propias radioemisoras y emitir desde distintos puntos de la urbe alteña, sin contar con la autorización correspondiente de la Autoridad de Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT).

“Según la ATT mientras estas organizaciones sociales no cuenten con un permiso de la ATT, son consideradas ilegales, según el Ingeniero Cliford Paravicini, Director Ejecutivo de la ATT”, señaló el Periodista.

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Agencia Regional de Noticias -- ARN

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