lunes, 10 de octubre de 2011

PROPIETARIOS DE FARMACIAS SE MOVILIZAN EXIGIENDO MODIFICACIONES A LA LEY DEL MEDICAMENTO


Presidente de Farmacias, Rolando Martínez (ATIPIRI).
El Alto, 10 Oct. (ATIPIRI).- La Asociación de Profesionales Propietarios de Farmacias (APPF) de El Alto junto otras filiales se movilizan en la sede de Gobierno exigiendo a las autoridades la modificación a la Ley 1737 de Medicamento con el objetivo de establecer mayor control al funcionamiento de las farmacias y la presentación de un rigurosa documentación para abrir un boticario.

Rolando Martínez, Presidente de la Asociación de Profesionales Propietarios de Farmacias (APPF) de El Alto señaló Radio Atipiri que las autoridades no están haciendo cumplir a cabalidad la Ley del Medicamento, razón por la cual en un ampliado, realizado el pasado mes, se determinó enviar un proyecto de modificación de Ley del Medicamento a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) y movilizaciones constantes hasta su tratamiento.

“Hay que endurecer el mayor control en todo lo que significa el manejo del medicamento este un profesional farmacéutico. Nuestra propuesta tiene pilares fundamentales de que debe existir el precio único, es decir, que no exista diferencia entre el precio de un medicamento de una farmacia centro y un boticario alejado”, afirmó Martínez.

Según el representante la actual Ley del Medicamento está permitiendo el oligopolio en la venta de medicamentos. Las grandes cadenas o corporaciones de farmacias están comprando a los importadores, lotes íntegros de medicamentos, a un precio menor. Pero estas proveedoras les venden a un precio mayor, ese mismo medicamento, a las farmacias pequeñas. Por lo cual exigen la igualdad en la venta de medicamentos para evitar que la población sufra por la elevación de precios.

Por otra parte, el representante ha denunciando el funcionamiento de más de 200 farmacias ilegales que funcionan en la urbe alteña presuntamente autorizadas por algunas autoridades de salud, razón por la cual demandó un mayor control, por ser un peligro para la población.
Martínez responsabilizó al Servicio Departamental de Salud (SEDES) La Paz y al Servicio Regional de Salud (SERES) El Alto por no realizar un control periódico y permitir la proliferación de más de 200 farmacias clandestinas en la urbe alteña, mismas que no cumplen ninguna de las normas establecidas por Ley para su funcionamiento.

Las farmacias deben ser atendidas por un ó una profesional Bioquímico Farmacéutico, Químico Farmacéutico o un Farmacéutico. El profesional debe vestir un guardapolvo con su marbete respectivo, pero los establecimientos clandestinos no son atendidos por estos profesionales. Según Martínez a diario su persona registra denuncias, de sus afiliados, por la apertura y el funcionamiento de una farmacia clandestina en una zona alteña.

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Agencia Regional de Noticias -- ARN

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