El Alto, 27 Mar. (Atipiri).- El combinado de estudiantes con discapacidad de CRICADI y la Unidad Educativa Los Andes se coronaron campeones del primer torneo relámpago de fútbol de salón por una “Educación Inclusiva” en la ciudad de El Alto.
El evento deportivo se jugó desde las 10.00 de mañana en la cancha deportiva de la zona Tahuantinsuyo, en la Plaza Sol, al norte de la ciudad.La organización no gubernamental sin fines de lucro Ricerca e Cooperazione, organizo el evento.
En el disputado cotejó los estudiantes del Centro de Rehabilitación Integral para Niños y Jóvenes con Capacidades Diferenciadas (CRICADI) y Los Andes sometieron al Centro de Rehabilitación Física (CEREFE) y la Unidad Educativa Mariscal Andrés de Santa Cruz por 4 – 1.
Los 20 minutos del partido fueron intensos, hasta el pitazo final del árbitro. Ninguno cedió espacios en el terreno de juego.
En el torneo paralelo el colegio Villa Cooperativa fue el campeón al derrotar 3-1 a la unidad educativa Noruega, que termino como subcampeón.
Los equipos recibieron trofeos y reconocimientos.
INCLUSIÓN
La directora del proyecto Elena Cipollini, la técnico de la Unidad protección de la persona con discapacidad del municipio de El Alto, Natalia Paquiri, coincidieron en señalar que estos eventos unen a dos poblaciones que habitualmente no comparten.
La idea del campeonato es compartir, “es una forma de sensibilizar. Que en un mismo espacio puedan estar compartiendo y jugando niños y jóvenes con y sin discapacidad”, expresó Cipollini.
“La importancia de este encuentro deportivo, es que están unidos. En esta ocasión están participando en un mismo equipo de futbol de salón y cada uno valora sus potencialidades”, afirmó Paquiri.
Cristhian Placido Llusco, un joven con discapacidad de 20 años sostuvo que le parece una excelente idea integrarlos a la sociedad a través de esta clase de campeonatos de futsal. “Para nosotros no existe nada imposible”, aseguró mientras se alistaba para ingresar a la cancha.
Jorge Luis Pachacuti (17) “me gusta compartir. Es una cosa buena. Nosotros podemos hacer todo”.
Ariel Álvaro (10) de quinto de primaria de la Unidad Educativa Mariscal Andrés de Santa Cruz, es “una buena idea que puedan jugar (niños y jóvenes con discapacidad) con nosotros hay que ayudarlos”.
La educadora especial Rocío Quino, indicó “que es una forma de integración a la sociedad”.
LETREROS
Cipollini, hizo entrega de letreros de “Unidades Educativas Inclusivas” a: Villa Cooperativa, Túpac Katari, Villa Ingenio, Noruega, Los Andes (mañana y tarde), Educativa Mariscal Andrés de Santa Cruz, Elizardo Pérez y Tahuantinsuyo.
Los directores y docentes de los establecimientos facilitaron el acceso a la educación primaria y secundaria de niños, niñas y adolescentes con discapacidad física, auditiva, visual e intelectual.
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