Efectivos policiales en la avenida Ramiro Castillo (ATIPIRI). |
La Paz, 19 Oct. (ATIPIRI).- “Fuera…fuera”, gritaron y silbaron varios vecinos y vecinas, hoy miércoles, a los efectivos policiales, que intentaron brindar seguridad ciudadana a la gigantesca marcha en defensa del TIPNIS, por el contrario repudiaron la violenta represión policial que ejercieron el pasado 25 de septiembre en Yucumo, Beni contra la marcha indígena.
Los uniformados intentaron brindar seguridad ciudadana a la gigantesca caravana de marchistas del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) que llegó a La Paz, pero fueron abucheados por la población, razón por la cual optaron por replegarse hacia algunas de las equinas de la avenida Ramiro Castillo de la zona Villa Fátima, por donde pasaron centenares de marchistas nativos.
Sobre la vía se observó a más de 10 efectivos policiales que circulaban en motocicletas de un lado para el otro, pero en su patrullaje sufrieron varios silbidos y el rechazo de la población.
“Fuera…ellos en Yucumo han bloqueado a los indígenas marchistas, los han secuestrado, los han maltratado, lo patearon a los indígenas y eso no puede ser. Ahora quieren brindar seguridad ciudadana, eso no vale, para que, que peligró corren en La Paz, si los estamos recibiendo con los brazos abiertos”, sostuvo un vecinos molesto por la circulación policial.
Sin embargo, por la avenida Ramiro Castillo de la zona Villa Fátima emergió una gigantesca caravana de marchistas indígenas del TIPNIS, quienes recibieron una solidaria, emotiva y afecto de la población paceña, El Alto y delegaciones del interior del país.
Los marchistas se sorprendieron por el gran recibimiento de la población paceña.
RECORDEMOS
El pasado 15 de agosto, la VIII Gran Marcha en defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) partió desde la ciudad de Trinidad, Beni con el objetivo de rechazar la construcción del tramo II de la carretera Villa Tunari a San Ignacio de Moxos, porque causará una destrucción del habitad natural de las comunidades que en ella viven. Por lo cual exigieron al Gobierno el respeto al derecho de la consulta previa para conocer si los indígenas aceptan o no la construcción de la vía por medio del TIPNIS.
El domingo 25 de septiembre a las 17:00 horas cerca de 500 policías armados con balines y gases lacrimógenos intervinieron violentamente el campamento donde los indígenas se encontraban descansando, misma que dejó varios heridos y la desaparición de varios niños. Detuvieron a los marchistas, les cerraron la boca con cinta y los obligaron a subirse en cinco buses policiales para ser llevados a su lugar de origen en forma de prisioneros, pero este lunes la población enardecida en la localidad de Rurrenabaque liberaron a los indígenas de las manos policiales.
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