La Paz, 13 Ago. (ATIPIRI / ABI).- El presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, lamentó el sábado la decisión de los dirigentes del Comité Cívico de Potosí (COMCIPO) que no asistirán al diálogo convocado por el Gobierno para el domingo en La Paz, con el propósito de resolver las demandas de esa región y frenar la movilización anunciada para el lunes en ese departamento sureño.
"Lamento la actitud de los compañeros de no asistir al diálogo, habrá que replanificar la reunión para otro día pero igual los ministros, como lo han hecho semanas atrás, seguirán yendo a las mesas de diálogo para recoger sugerencias", dijo en una conferencia de prensa dictada en Palacio de Gobierno.
Recordó que el Gobierno realizó una "respetuosa" invitación a los dirigentes cívicos de Potosí para explicarles el avance del pliego petitorio de seis puntos acordado con el Comité Cívico de ese departamento en agosto de 2010.
El Mandatario negó una supuesta desatención a las demandas regionales, entre ellas, la delimitación territorial de las comunidades de Quillacas (Oruro) y Coroma (Potosí); la instalación de la fábrica de cemento en Coroma; la puesta en marcha de la planta de fundición de Karachipampa; la preservación del Cerro Rico; la construcción de un aeropuerto internacional y la atención de proyectos viales.
"Durante las últimas semanas han estado nuestros ministros en reuniones con COMCIPO y asambleístas departamentales, el Ministro de Minería (José Pimentel) asistió hablar el tema de Karachipampa; y la Ministra de Autonomías (Claudia Peña) explicó el avance en el tema de Coroma, volveremos a reunirnos las veces que sea necesario", argumentó.
En esa línea, aseveró que el Ejecutivo "está respondiendo" a las demandas regionales de Potosí en base a un cronograma establecido.
A su juicio, el Gobierno de Evo Morales "ruega" a los sectores en conflicto para atender sus demandas a través del dialogo, a diferencia de las políticas de los "gobiernos neoliberales", que primero reprimían las protestas con el uso de la fuerza pública y luego convocaban a la concertación.
"Este es un Gobierno de trabajadores y de movimientos sociales que se ruega para el diálogo y más bien son algunos compañeros que no quieren ir al diálogo", sustentó.
En esa dirección, ratificó la predisposición del Gobierno para atender las demandas de todos los sectores, sin ningún tipo de "cálculos políticos".
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