Argentina, 23 Oct. (ATIPIRI).- Mientras Cristina Fernández espera tranquilamente el triunfo, varios opositores temen ante la posibilidad de extinguirse si ella supera el 55 por ciento como vaticina una consultora.
El pronóstico anunciaba que la Patagonia estará con cielos parcialmente nublados y una temperatura de 19 grados. Las condiciones ideales para que Cristina Fernández hiciera 'footing' acompañada de su hija Florencia y luego recibiera a sus colaboradores más íntimos en la residencia familiar de El Calafate.
Nada diferente a lo que suele hacer todos los fines de semana, excepto que hoy es el día en que los argentinos deciden si le renuevan el mandato o si votan por cualquiera de sus cinco adversarios. Al respecto la presidenta dijo hoy que "votar es una fiesta. Poder votar libremente en Argentina es un activo institucional inédito".
Atentos pero no ansiosos, pues no cabe duda de que Cristina se encamina a un segundo período en la Casa Rosada, con el apoyo del 50% de los votantes, si no más. De hecho, algunas encuestas le pronostican entre el 54% y el 56% del sufragio. De ser así, la abanderada del Frente Para la Victoria (FPV) se convertirá en la candidata presidencial con mayor respaldo desde que Juan Domingo Perón ganó los comicios de 1973 con el 62% de los votos.
La presidenta emitió su voto en Río Gallegos y se mostró emocionada al recordar a su esposo: "Soy la presidenta, militante, pero sobre todas las cosas soy una mujer, la mujer de un hombre que marcó la vida de la política argentina, que ha ingresado definitivamente en la Historia", dijo entre lágrimas.
"Se que él (Kirchner) desde donde esté, debe estar muy contento", añadió la presidenta, que junto a su escolta personal se abrió paso a duras penas entre los cientos de simpatizantes que la aguardaban en la escuela donde votó.
COMICIOS GENERALES
En esta jornada, los 5.280.300 ciudadanos habilitados para el voto también eligen al próximo vicepresidente, a los gobernadores de nueve provincias y se renueva un tercio de los escaños del Congreso.
A diferencia de la moderada expectación con que Cristina espera los resultados en su reducto patagónico, en los cuarteles bonaerenses de la oposición el clima es como la antesala del Juicio Final. Diana Capurro, directora de la consultora Poliarquía, vaticinó que si la candidata oficialista sobrepasa la barrera del 55%, algunos partidos junto con sus líderes podrán desaparecer del mapa político.
Tal es la amenaza que gravita sobre Elisa Carrió, la candidata presidencial de Coalición Cívica (CC) que en las elecciones del 2007 quedó en un honroso segundo lugar detrás de Cristina y que ahora piensa seriamente en dedicarse al cultivo de verduras orgánicas en su chacra de las afueras de Buenos Aires.
Al abanderado del Frente Compromiso Federal (FCF), Alberto Rodríguez Saa, le quedará el consuelo de seguir ejerciendo como gobernador de San Luis, una de las provincias más fértiles y prósperas de Argentina.
¿Qué será en cambio de Eduardo Duhalde si los sombríos augurios se cumplen en su candidatura? El candidato del Frente Popular (FP) no ha cultivado ningún hobby que le permita aceptar con resignación la suerte de quedar en el tercer o cuarto lugar de la tabla, como anticipan las encuestas.
Su condición será como la de un héroe de las tragedias griegas, si se toma en cuenta que fue él quien apadrinó la candidatura de Néstor Kirchner, en el 2003, creyendo que lo podrá manejar como a una marioneta. El marido y antecesor de Cristina no tardó un mes en sacudirse de su tutela y lo que vino después ya es parte de los anales de política nacional.
Fuente: Tomado de elmundo.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario